1) Cortar la calabaza en cubos pequeños. Picar la cebolla y el ajo.
2) Calentar el aceite de oliva en una olla a fuego medio. Saltear la cebolla y el ajo hasta que estén tiernos.
3) Agregar la calabaza, el jengibre, la cúrcuma, el comino y la pimienta negra. Cocinar durante unos minutos y revolver.
4) Verter el caldo de verduras y llevar a ebullición. Reducir el fuego y cocinar a fuego lento durante 20 minutos, o hasta que la calabaza esté blanda.
5) Retirar del fuego y dejar enfriar un poco.
6) Licuar la sopa hasta que quede suave y cremosa. Agregar la crema de leche y sazonar con sal.
7) Servir caliente, decorada con semillas de calabaza, un chorrito de crema y cilantro fresco picado (opcional).